Una de las grandes preocupaciones que tenemos cuando viajamos a un país extranjero es cómo trasladarnos desde el aeropuerto hasta el alojamiento que hemos contratado, bien sea hotel, apartamento, etcétera.
Dependiendo del país y la ciudad que hayamos tomado por destino, nos vamos a encontrar con más o menos barreras, desde el idioma a los tipos de transporte disponibles.
Transporte público
No todas las ciudades tienen servicios de transporte público que nos puedan facilitar los traslados desde el aeropuerto a la ciudad, mientras que otras ciudades tienen todo tipo de facilidades. Antes de iniciar vuestro viaje es importante que investiguéis sobre ello, que conozcáis cuáles son vuestras opciones y si hay este servicio, cuáles son sus tarifas y los horarios disponibles.
Estos dos últimos aspectos son muy importantes. Por ejemplo en España, en cuanto a las tarifas, si vais a viajar en tren o en metro normalmente no tenéis porque tener ningún problema para comprar vuestro billete con la tarjeta de crédito, pero sí que podéis encontrar alguna dificultad para pagarlo con un billete de 50 euros o si la moneda es diferente. Al igual, si vais a viajar en autobús, no siempre dejan pagar con billetes pues tienen poco cambio y pueden pedir el precio exacto del traslado.
En cuanto a los horarios del transporte público es importante que los conozcas y tengas a mano porque todos sabemos que los horarios de los vuelos a veces se retrasan, por lo que no sabes la hora exacta a la que vas a llegar o cuándo podrás tener tu maleta. Si llegas de madrugada es posible que no tengas ningún servicio de transporte público, por lo que puedes hacer tiempo en el aeropuerto hasta que comience a funcionar de nuevo.
Si tomamos como ejemplo el funcionamiento del transporte público en la ciudad de Madrid, sabemos que disponemos de varias opciones: tren de Renfe Cercanías, Metro de Madrid (línea 8) y autobuses que salen tanto desde el interior de la ciudad como la periferia (200, 101, 822, 824, 827 828) y el Exprés que funciona las 24 horas.
Taxi
El taxi es otro de los medios de transporte más habituales para trasladarse desde el aeropuerto, lo que pasa es que no suelen ofrecer un precio cerrado y tampoco se conoce la ciudad que se visita, por lo que uno no sabe si le están haciendo un tour anticipado por la ciudad o le están llevando directamente al hotel.
Esto suele generar una gran desconfianza entre los turistas pero cuando uno no conoce otros medios de transporte, lo aceptan sin rechistar.
En todos los aeropuertos suele haber un gran número de taxistas, algunos de ellos esperan a que tú les indiques que necesitas de sus servicios para que se acerquen, mientras que en otros se ofrecen directamente a llevaros la maleta en cuanto os ven salir y os puede costar quitároslos de encima. Atentos a esto porque puede resultar un poco agobiante.
Una opción que tenéis es concertar este servicio con anterioridad y con la asociación del taxi del lugar (si es que la hay en el país que vais a visitar), de esta manera podéis concretar un poco más los datos y tener la seguridad que os habéis montado en el coche de un profesional y no de un taxista pirata.
Chófer
Si no habéis encontrado una asociación del taxi o todavía lo veis con cierta inseguridad, tenéis la opción de contratar los servicios de conductores profesionales a través de Blacklane, que es un portal de chóferes que sirve para conectar a los clientes con conductores locales.
Una de las ventajas que ofrece, con respecto a los taxistas que antes mencionábamos, es que os van a ir a buscar al aeropuerto con un rótulo con vuestro nombre (por lo que no hay pérdida), os ofrecen un precio cerrado desde el principio y son conductores profesionales.
Podéis contratar este servicio en 186 ciudades y 50 países distintos, por lo que fácilmente vais a poder viajar con seguridad y garantías.
Alquiler de coches
Una opción más que también puede resultar de vuestro gusto, sobre todo a aquellas personas que os gusta conducir y que preferís tener el control de las situaciones, es alquilar un vehículo en el aeropuerto.
Lo mejor es que lo dejes hecho con anterioridad, es decir, que investigues las empresas de alquiler de coches que se encuentran en el aeropuerto o si existe la posibilidad de que te lo dejen allí. Como siempre, comprueba las tarifas, los seguros que te piden y las garantías; una vez que estés frente al vehículo, fíjate en su estado tanto en el interior como en el exterior, para que luego no haya ningún problema.
Cuando solicites un vehículo, comprueba si alguno tiene sistema GPS incorporado pues te facilitará llegar a tu destino y ahorrar datos del móvil. Otra opción, es llevar tu propio aparato GPS o trasladarte por la ciudad con los mapas de siempre.